DEJANDO MEMORIA Y VIDA EN ESTE LUGAR

29 de agosto de 2007


------------ <<<<<<<<<<<<<<< El VIOLIN >>>>>>>>>>>>>>>>>>>>> ----------------

Es una película que refleja mucho de lo que en regiones como Oaxaca, Guerrero, Puebla Chiapas y otras tantas –en México y Latinoamérica- han vivido: la violencia en su máxima expresión. El Violín es una película que atrapa esos momentos en el que el ser humano es vulnerable a la violencia, amargura, arrebato de aquellos que por estar protegidos por “las instituciones” tienen el poder y abusan de él. Sin embargo, también deja al descubierto la dignidad del ser cuando Don Plutarco decide parar de tocar su violín para calmar a las bestias. SE ACBÓ LA MÚSICA dijo Plutarco con voz definitiva. Aunque todas las escenas se muestran como una fotografía casi perfecta de la realidad, esta última frase le puso el sello a la película. Plutarco fue asesinado pero por una decisión personal completamente compasiva y de solidaridad con los suyos.
La película es una especie de tortura y enfrentamiento con la realidad misma, mientras veía las escenas desgarradoras me decía a mí misma, es solo una película, al mismo tiempo me respondía no, esto es la realidad y no hay forma de evadirla. El violín, me recordó que no hay tiempo que perder y que la operación hormiga que Plutarco emprende en ayuda de sus compas es más valiosa y trascendente que cualquier discurso masivo.

Que nunca muera la rebeldía!

El VIOLIN

Es una película que refleja mucho de lo que en regiones como Oaxaca, Guerrero, Puebla Chiapas y otras tantas –en México y Latinoamérica- han vivido: la violencia en su máxima expresión. El Violín es una película que atrapa esos momentos en el que el ser humano es vulnerable a la violencia, amargura, arrebato de aquellos que por estar protegidos por “las instituciones” tienen el poder y abusan de él. Sin embargo, también deja al descubierto la dignidad del ser cuando Don Plutarco decide parar de tocar su violín para calmar a las bestias. SE ACBÓ LA MÚSICA dijo Plutarco con voz definitiva. Aunque todas las escenas se muestran como una fotografía casi perfecta de la realidad, esta última frase le puso el sello a la película. Plutarco fue asesinado pero por una decisión personal completamente compasiva y de solidaridad con los suyos.
La película es una especie de tortura y enfrentamiento con la realidad misma, mientras veía las escenas desgarradoras me decía a mí misma, es solo una película, al mismo tiempo me respondía no, esto es la realidad y no hay forma de evadirla. El violín, me recordó que no hay tiempo que perder y que la operación hormiga que Plutarco emprende en ayuda de sus compas es más valiosa y trascendente que cualquier discurso masivo.

Que nunca muera la rebeldía.